viernes, 28 de diciembre de 2012

La demencia criminal

Por José Luis Quesada Garijo
Estudiante de bachillerato, Colegio Internacional Altair (Madrid)
III Concurso «Mejor entrada» del Blog Derecho y Cultura-Biblioteca de Derecho UAM

La película «El secreto de sus ojos» trata sobre le posibilidad de descubrir a un criminal por la expresión facial u ocular que muestre en ciertos momentos de su vida, en este caso, mediante unas fotos en las que mira con «lujuria» a la víctima. Pero la pregunta es ¿se puede considerar a los «dementes» auténticos criminales, ya que no son del todo conscientes de sus actos?

La respuesta es: sí, ya que, aunque inconscientemente, el crimen se ha cometido, y no sabemos si el «criminal» provocará otros, aunque sea en contra de su voluntad.

La locura no tiene porqué estar siempre presente en el individuo afectado, ya que este puede tener episodios psicóticos ( como se ha podido observar en ciertas películas como «Psicosis» o la citada anteriormente «El secreto de sus ojos»), y como no se sabe cuando alguno de los afectados tiene dichos episodios, es muy difícil determinar si en el momento del crimen era consciente de sus actos o no, por lo que no se les puede considerar inocentes de todo cargo debido a su condición mental, ya que sino todos los criminales alegarían demencia u otros síntomas o trastornos mentales.

Aunque la gente con trastornos mentales sea una minoría, se pueden llegar a ver muy excluidos debido a su condición, lo cual puede llegar a agravar su estado psicológico, por lo que, ¿qué se puede hacer para evitar el semejante discriminación?

En la sociedad actual, ciertos países no buscan a los verdaderos culpables, sino a cualquiera al que cargarle el muerto y que no pueda defenderse debido a falta de recursos por su situación social, degradando a la persona aún mas por culpa de una justicia corrupta y falta de derechos y moralidad. La única manera de encontrar a los verdaderos culpables y decidir si algún «enfermo» mental debería cumplir condena es mediante la empatía.

En múltiples ocasiones criminales que cometieron sus actos motivados por sus ideales y no por ninguna demencia momentánea, declararon ser dementes y se les aplicó una condena menor. Esto provoca que auténticos asesinos acaben libres muchísimo antes .

Por fortuna, la justicia no es tan incompetente como aparenta en ocasiones, ya que se realizan test psicóticos para comprobar si los criminales son dementes. Ya que por su crimen deben ser juzgados.

Ojo por ojo, diente por diente

No hay comentarios:

Publicar un comentario