El 7 de marzo de 2013 Miguel Mora corresponsal de EL PAIS en Francia llegó a las dependencias que el diario español ocupaba en el edificio de Le Monde y que compartía con otros profesionales como el fotógrafo Daniel Mordzinski y vio con asombro cómo este despacho había sido vaciado sin consultar absolutamente nada a los propietarios de los materiales allí guardados.

Resulta increíble que el trabajo de toda una vida pueda desaparecer tan repentinamente debido a la falta de consideración y respeto por el trabajo gráfico y documental de estos profesionales de la información. Únicamente se han conservado los documentos digitalizados, lo que nos lleva a cuestionarnos y replantearnos la conservación y preservación digital no solo como medio para la gestión eficaz de la información, sino como instrumento para garantizar la pervivencia del patrimonio cultural.
Para leer el relato del propio autor puede consultar el siguiente enlace.
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