Es relativamente habitual que desde este Blog analicemos
películas del oeste. Sin duda existen otros géneros como el «drama judicial» con una vinculación directa con el mundo del Derecho aunque, lamentablemente,
este género no se ha explotado demasiado en España. Por este motivo las
historias mejor valoradas por la crítica normalmente están ambientadas en
Estados Unidos que, como sabemos, destaca por su producción cinematográfica. En
general el enfoque de las películas y los temas tratados son válidos y de
interés en todos los países, pero el proceso judicial en sí difiere bastante de la tradición de la Europa continental. Por ejemplo, en el ámbito anglosajón los
precedentes (sentencias emitidas por los tribunales ante asuntos que no se
habían tratado anteriormente) tienen una importancia vital para la resolución de
los litigios. Para encontrar filmes de este género recomendamos visitar la
exposición «El proceso judicial en el cine» que la Biblioteca de Derecho de la
UAM organizó hace algunos años).
Pero el ideal de justicia plasmado en el Western es
universal. Ya lo hemos mostrado en entradas como «La justicia y el cine del oeste» o «Solo ante el peligro».
En esta ocasión recuperamos «El último tren de Gun Hill» (1959) de John
Sturges. Dos criminales violan y asesinan a la esposa de origen indio del
sheriff Matt Morgan (Kirk Douglas). El sheriff que personaliza el afán de
justicia promete no descansar hasta encarcelar a los autores del asesinato. Sin
embargo, su búsqueda lo lleva a encontrarse un amigo al que hace años que no
ve, Craig Belden (Anthony Quinn) cacique del lugar, dueño de prácticamente todo
el pueblo y los terrenos circundantes. Su posición le hace poseedor de un poder
tremendo que le permite estar por encima de la ley, hasta que Matt Morgan
descubre que los asesinos de su mujer guardan una estrecha relación con Craig y
este se opone a que el sheriff haga su trabajo.
A partir de ese momento comienza el duelo en el que el
sheriff promete llevarse arrestados a los criminales en el último tren que
abandona el pueblo. Con todo el pueblo esperando a que los hombres de Craig
acaben con Matt Morgan, este tendrá que recurrir a sus firmes convicciones para
poder cumplir sus objetivos.
Interesantísima entrada. Qué recuerdos... saludos,
ResponderEliminarGran película con un trasfondo jurídico muy interesante, que nos hace reflexionar sobre uno de los principios básicos de la ley: la justicia.
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